SAN MARTIN DE PORRES
1579-1639
TRIDUO
DÍA PRIMERO
Bienaventurado Martín, siempre compasivo, padre de los pobres y necesitados; míranos con piedad y ruega por nosotros que te invocamos con fe absoluta en tu bondad y en tu poder. No nos olvides ante Dios, a quien siempre serviste y adoraste. Amén.
Pídase la gracia que se desea alcanzar.
Padrenuestro, Avemaría, Gloria y oración final.
DÍA SEGUNDO
¡Oh glorioso Fray Martín, bendecimos al Señor por el gran poder que se dignó otorgarte, concediéndote dominio sobre la vida y la muerte! Animados por la generosidad con que derramas los dones de Dios, recurrimos a ti con la mayor confianza. Todo lo esperamos de tu intercesión, y por los méritos de Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
ídase la gracia que se desea alcanzar.
Padrenuestro, Avemaría, Gloria y oración final.
DÍA TERCERO
¡Oh San Martín! Si en la tierra vivías sólo para Dios y tus semejantes, hoy que te hallas ya junto al trono de la misericordia, puedes disponer mejor de sus tesoros. Si aquí conocías dónde estaba la necesidad para remediarla, mejor la ves desde el cielo donde moras. No defraudes las esperanzas de los que deseamos verte ensalzado en la tierra y alcánzanos lo que te pedimos. Amén.
ídase la gracia que se desea alcanzar.
Padrenuestro, Avemaría, Gloria y oración final.
ORACIÓN FINAL
En esta necesidad y pena que me agobia y conturba sin hallar consuelo humano, acudo a ti, oh abogado y protector mío, San Martín; confío en tu poderoso valimiento para que, intercediendo por mi ante el Dios de bondad y misericordia, me sean perdonadas mis culpas y me vea libre de los males y desgracias que me afligen; dame, al menos, tu espíritu de sacrificio para que aceptándolas por amor de Dios las santifique
¡Oh Padre Celestial, por los dulces nombres de Jesús y de María y por los méritos de tu fiel siervo Martín, ayúdame en esta angustia y no permitas que quede confundida mi esperanza!. Amén.