Mensaje del 22 de agosto de 1974
Fiesta de María Reina
Mi Reino.
“…Pronto verás en todo su esplendor el gran designio que la Madre tiene sobre ti. Tú serás siempre mi hijito que no sabe decir ni hacer otra cosa que estar Conmigo, hablar Conmigo, dejarme actuar. En ti me manifestaré. Tendrás también que sufrir porque muchos — de buena fe — pondrán obstáculos a mi acción de Madre. Pero al fin comprenderán y llegarán a ser mis hijos más dóciles. Hoy me aclama la Iglesia y el Paraiso todo como Reina. Mi Hijo Jesús me ha dado esta corona de gloria. ¡Si supieras, hijo, qué gloria tan grande, cuánto consuelo recibo cuando Yo reino como soberana en tu corazón! ¡Que el corazón de todos mis Sacerdotes sea el Reino en el cual Yo pueda reinar! ¡Así, pronto mi Corazón maternal triunfará en todos mis hijos!”