Mensaje de 21 de agosto de 1973
Fiesta de San Pió X
En mi Corazón Inmaculado en oración.
¿Por qué no escribes todo cuanto te hago sentir en tu corazón? Me dices que son cosas demasiado íntimas, demasiado bellas. Pero un día deberá saberse cuánto te he amado, cuántas cosas grandes he obrado en ti. Y esto sólo porque tú has ofrecido totalmente a mi Corazón tu nulidad… Acostúmbrate a ser pisoteado, a ser olvidado, a no ser comprendido ni considerado. Es necesario que suceda así para ti. Y cuando sientas dentro de ti una rebelión interior que te lleve a decirte a ti mismo: “¿por qué?, no es justo, debo reivindicar mis justos derechos. Responde en seguida: apártate Satanás ¿No he de beber el cáliz que el Padre me ha preparado?” (…). Yo misma vendré en ayuda de tu gran debilidad. Pero tú permanece siempre en cada instante en mi Corazón en oración. Deja que Yo obre cada vez más en ti.»