Corona de la vida del Señor: Parte I [1]
MISTERIOS DE LA VENIDA SACRATÍSIMA DEL SEÑOR
El arcángel Gabriel anuncia a María santísima la Encarnación del Verbo divino en su purísimo seno.
Ave María
1. El Hijo de Dios hecho hombre nace de María Virgen en un pesebre. Padre nuestro.
2. Los Ángeles se alegran, y cantan: gloria in excelsis Deo. Padre nuestro.
3. Le adoran los pastores, avisados por los Ángeles. Padre nuestro.
4. Al octavo día es circuncidado y recibe el santísimo nombre de Jesús. Padre nuestro.
5. Es adorado por los Reyes magos, quienes le ofrecen oro, incienso y mirra. Padre nuestro.
6. Es presentado en el templo, y profetizado Salvador del mundo. Padre nuestro.
7. Huyendo de la persecución de Herodes, es llevado a Egipto. Padre nuestro.
8. No encontrándole, son degollados los Inocentes. Padre nuestro.
9. San José y su Madre le vuelven á Nazaret, su patria. Padre nuestro.
10. A la edad de doce años disputa en el templo con los doctores. Padre nuestro.
MISTERIOS DE LA CONVERSACIÓN SANTÍSIMA DEL SEÑOR
Jesús es obedientísimo a su Madre la Virgen santísima y a san José.
Ave María
1. A la edad de treinta años es bautizado por san Juan en el Jordán. Padre nuestro.
2. Ayuna cuarenta días en el desierto , y vence al demonio tentador. Padre nuestro.
3. Practica y predica su santa ley de vida eterna. Padre nuestro.
4. Llama a sí a los discípulos, quienes al punto lo dejan todo para seguirle. Padre nuestro.
5. Hace el primer milagro convirtiendo el agua en vino exquisito. Padre nuestro.
6. Sana a los enfermos, endereza a los estropeados, da oído a los sordos, vista a los ciegos y vida a los muertos. Padre nuestro.
7. Convierte pecadores y pecadoras, y les perdona sus pecados. Padre nuestro.
8. Perseguido de muerte por los judíos, en vez de castigarlos los corrige con dulzura. Padre nuestro.
9. Se transfigura sobre el monte Tabor en presencia de Pedro, Santiago y Juan. Padre nuestro.
10. Entra triunfante en Jerusalén montado en un asno, y arroja a los profanadores del templo. Padre nuestro.
1. Esta devoción, extraída de un libro de oraciones de mediados del siglo XIX, está prácticamente olvidada en los devocionarios modernos. Pese a ello numerosos Papas del pasado como León X, Gregorio XIII o Sixto V, le concedieron indulgencias. Su origen se atribuye al beato Miguel de Florencia, monje camaldulense, quién la rezó diariamente hasta el día de su muerte ocurrida el 11 de enero de 1522. Se llama Corona de la vida del Señor porque se reza en honor de Jesucristo y se compone de treinta y tres Padrenuestros en memoria y veneración de los treinta y tres años que vivió en la tierra. Se divide en cuatro partes: la Venida, la Conversación, el Tránsito y la Glorificación. Además se rezan cinco avemarías en honor a sus cinco llagas. Por último se termina rezando el Credo en honor de los santos Apóstoles y como un perfecto resumen del nacimiento, vida y muerte de nuestro redentor Jesucristo.